BRC es, junto con IFS, la norma más implantada en las centrales hortofrutícolas. La norma pertenece al British Retail Consortium (Consorcio de Minoristas Británicos).
Contempla todas las fases posteriores a la recolección hasta la expedición de los productos.
Los requisitos de BRC se basan en Buenas Prácticas de Manipulación y Envasado, con tres pilares fundamentales: Disponer e implantar un sistema de gestión de la calidad, disponer e implantar un sistema APPCC y disponer de unas instalaciones acordes y adecuadas a los productos procesados.
BRC es más exigida por clientes anglosajones y nórdicos.